A pesar de los avances en los métodos y el instrumental para el diagnóstico, los programas de prevención y detección temprana, la eficiencia de los tratamientos y un incremento notable en el conocimiento de la enfermedad, el cáncer de mama es la neoplasia (la proliferación inusual de células epiteliales que se reproducen sin control, producto de mutaciones somáticas) maligna más frecuente entre las mujeres occidentales, y la principal causa de muerte por cáncer en los países más desarrollados, donde ha desplazado al cáncer de útero en las mujeres de más de 25 años de edad.
El Mes de Sensibilización sobre el Cáncer de Mama se celebra en todo el mundo durante octubre con el objetivo de llamar la atención y motivar el apoyo mancomunado para promover la prevención, la detección precoz, el tratamiento y los cuidados paliativos dedicados a quienes padecen esta enfermedad –muchas veces mortal– causada por la multiplicación anormal de las células de la mama que forman tumores malignos.
El cáncer de mama es una patología que afecta mayoritariamente a las mujeres (en una proporción muy pequeña –1%– también es padecido por los hombres) sobre todo de entre 45 y 80 años de edad, y pese a que no se conocen con certeza sus causas, deben tenerse en cuenta ciertos factores de riesgo entre los que se destacan:
- Ser mayor de 50 años.
- Tener antecedentes personales de cáncer de mama o de enfermedad benigna (no cancerosa) de mama.
- Tener antecedentes familiares de cáncer de mama (el cáncer hereditario representa entre el 5 y el 10% de todos los casos de cáncer de mama).
- Recibir o haber recibido algún tratamiento con radioterapia dirigida a la mama o el pecho.
- Recibir o haber recibido algún tratamiento con hormonas, como estrógeno y progesterona.
- Iniciar la menstruación a edad temprana.
- Edad avanzada en el momento del primer parto o nunca haber tenido hijos.
- Sobrepeso.
- Sedentarismo.
- Tabaquismo.
- Consumo de alcohol en proporciones mayores a las recomendables.
Es muy importante notar que más del 75% de las mujeres que presentan cáncer de mama no tiene ningún antecedente familiar ni personal de esta enfermedad.
En la Argentina (luego de Uruguay, el país de América Latina con mayor tasa de mortalidad por esta afección), el cáncer de mama es la primera causa de muerte por tumores en mujeres: cada año, 5.600 personas mueren debido al cáncer de mama, y el número sigue en crecimiento.
Por cada millón de habitantes de sexo femenino en nuestro país, 710 padecen cáncer de mama; 416 mujeres mueren alrededor de los 50 años por esta causa, y al avanzar la edad, la mortalidad trepa entre las mujeres hasta las 2.158 muertes a los 80 años.
Cáncer de Mama y Responsabilidad Social Empresaria
Los conocimientos sobre las causas del cáncer de mama son insuficientes, por lo que el diagnóstico precoz es la piedra angular de la lucha contra esta enfermedad.
La detección temprana es fundamental, ya que los tumores de menos de 1 centímetro tienen hasta el 90% de probabilidades de curación.
Con la localización temprana de alteraciones en las mamas puede hacerse un diagnóstico adecuado y disponer el tratamiento, para el cual las posibilidades de curación son elevadas.
Cuando se detecta de manera tardía, es muy raro que pueda ofrecerse un tratamiento efectivo y son necesarios los cuidados paliativos con la finalidad de disminuir el sufrimiento de las pacientes y de sus familiares.
La Responsabilidad Social Empresaria (RSE) impone que medios, agencias y anunciantes tomen una participación activa en la difusión del máximo de información sobre el tema, y en el llamado de atención para alertar y generar conciencia sobre un problema de salud pública por demás importante.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) fomenta programas integrales de lucha contra el cáncer de mama como parte de los planes de lucha contra el cáncer en general.
Las estrategias recomendadas para la detección precoz entre la población son el conocimiento de los signos y síntomas iniciales, y la demostración de cómo se realiza la autoexploración de la mama: los programas de detección mamográfica son un complemento fundamental, con la condición de que sean realizados por profesionales especializados en mastología, pero es indispensable que las mujeres –y sus afectos– estén atentas siempre.
Por esta razón, desde la RSE debemos comprometernos a realizar una multiplicidad de acciones tendientes a promover el conocimiento y educar para la detección en este tema delicado y trascendente.
Fuentes: Grupo San Gerónimo, OMS.
